Querido mortal, sígueme...

31 de diciembre de 2012

Adiós 2012...¡Hola 2013!


Levántate y arranca ese año 2012 que ya casi ha terminado. Arranca todas las paginas malas, pero nunca las quemes, borra de tu mente cada segundo asfixiante que has pasado porque aunque no quieras algo has aprendido de todo lo malo. Guarda todo lo bueno, recopila todos esos momentos que siempre permanecerán ahí tras el paso de las horas, de los meses y de los años, sobrevive de ello y sonríe, sonríe siempre. La vida de cada uno se compone de recuerdos de tanto los buenos como los malos y también de los pequeños detalles, que en realidad son los mas grandes e importantes. 

Pero sobretodo... 
Vive la vida hoy y mañana también, 
vívela o te arrepentirás de no haber disfrutado del ayer.

Para mí este ha sido un año inolvidable, un año de sonrisas, un año de lágrimas, un año con alguna que otra sonrisa amarga , un año con miradas que hablan, un año con momentos perfectos, resumiendo este 2012 ha sido un año fugaz, que se ha ido al pestañear. 
Pero este 2013 está por llegar y no dudo que mejorará aún más.


¡Feliz año nuevo 2013 queridos mortales!

22 de diciembre de 2012

¡Eh tú! Quiero que sepas que…



 Me miras, te miro, sonrío. Mientras que te susurro te quiero al oído. Me pierdo en tu mirada y me vuelvo a perder una y otra vez, hoy y mañana también. Es imposible decirte en palabras lo que siento a tu lado. Pero voy a contarte unas cuantas cosas que seguro que desconocías de mí  y se que en tu mente, perdurarán para siempre. Quiero que sepas que los huecos de tu mano y de la mía, encajan a la perfección. ¿Casualidad? No lo creo, la verdad. Quiero que sepas que me acuesto y levanto pensando en tí y que al despertar, me desilusiono porque durmiendo a mi lado no estás. Quiero que sepas que cada vez que te susurro que te quiero, es porque realmente lo siento, yo nunca hablo de mis sentimientos en vano. Quiero que sepas, que sufro cuando tu olor se queda en mi impregnado, porque es una engañosa sensación de que te tengo cerca. Quiero que sepas que cada día me enamora tu sonrisa un poco más y que ya no me importa si te ríes de mi o conmigo. Porque solo quiero verte feliz. Quiero que sepas que me vuelvo cada vez un poco más loca, no lo niego, pero soy feliz así y no lo cambiaría por nada. ¿Que te necesito? Sí…aquí…conmigo. ¿Que quiero verte otra vez nada mas despedirme de tí? Pues por supuesto que sí. Decirte, que un par de palabras tuyas provocan en mi felicidad para todo el día. Contarte, que me encanta besos robarte. Susurrarte, que amarte, si que es un arte. Y podría seguir y seguir escribiendo cosas de tí, pero prefiero demostrártelas. Ya solo me importan tus palabras, tu voz, tu respiración, el sonido de los latidos de tu corazón… y es que desde que te conocí, el mundo, el tiempo y todo se paró a mi alrededor. 


¿Me echabais de menos? 
Perdonad mi tardanza, en publicar la entrada,
 queridos mortales os deseo Feliz Navidad y fiestas.
Deciros que el 15 de diciembre cumplí un año con el blog 
y agradeceros los comentarios y el seguirme cada vez que publico.
 ¡Os envio mucha felicidad! 

1 de diciembre de 2012

Llueve, porque lloro yo...


Extraña la sensación de ver que por fuera llueve y que por dentro llueve también. Sentir las frías gotas del exterior, sentir que te queman las del interior. Parece que  llueve, porque lloro yo. Irónico ¿no? Horrible y a la vez perfecta sensación. Escucho la lluvia desde la ventana de mi habitación, las gotas caen en el asfalto, mientras que las mías caen a la vez en el teclado. Tormenta sin truenos, ni rayos, tormenta que lo que único que consigue es atormentarme más, de lo que antes ya estaba. Nubes grises que forman parte del paisaje. Nubes tristes, que se llevan todo lo malo. Nubes que descargan en lluvia, lo que en lagrimas descargamos los humanos. Tarde de sollozos, tarde perdida. La mía, es ahora la mirada incomprendida, que solo busca una salida. Pero como tormenta, ya desapareces, te alejas de mí, como si ya no me conocieses. Vete y no vuelvas. Se que te vas, para volver cuando quieras, cuando menos me lo espere. Pero te juro que hasta que llegue ese día, esta tonta no perderá la oportunidad de reír y sonreír cada día.

Hoy llueve, porque lloro yo…

                    …mañana tronará, porque gritaré yo…
                                                                                  
                                                        …pero pasado mañana el sol saldrá y no desaparecerá 
                                                                                                              ...jamás.

                                                                              Porque lo digo, yo.                                               


Solo nosotros podemos conseguir la felicidad si nos lo proponemos.
La felicidad no se busca, ni se encuentra, es algo que está en nosotros, 
solo tenemos que aprender a ver los pequeños detalles,
 que son los que realmente valen la pena y 
nos dan razones para seguir sonriendo.

Entrada triste que escribí hace tiempo, 
pero finalmente motivadora, o eso creo...

24 de noviembre de 2012

Tú, que a veces dueles y a veces salvas.

Lo tuyo es el silencio y la pasión. Lo mío es romper aquel silencio y hablarte de lo que significa para mí el amor o no parar de reír.  Lo de ambos es mirarnos a los ojos y saber lo que piensa el otro, sin apenas cruzar palabras, solo miradas. No imagino el día en el que ya no estés a mi lado. Y si me lo imagino, me duele tanto la verdad. Y luego dicen que el amor no duele, que solo se siente. Y yo les digo, que porque no se vea, no significa que no duela. Que hasta incluso, quema y rompe en pedazos por dentro. Y les grito, que estos sentimientos a flor de piel, solo tienen un nombre, una sonrisa, un culpable. Que muchas de las veces duele, pero que la mayoría de ellas salva y cura lo que me hiere. ……………………………………………………

“Tú, culpable de que el mundo se pare cuando estoy a tu lado”
“Tú, al que conocí en el momento más inesperado”
“Tú, la persona que no desaparece de mi mente en las 24 horas del día”
“Tú, si no fueras mi insomnio, no dudes que te soñaría”
“Tú, que con caricias y abrazos, me quitas cualquier tonto enfado”
“Tú, quien me escuchas y entiendes, sin pedir nada a cambio”
“Tú, no me abandones, no me dejes caer, pero sobretodo, no me sueltes
“Tú, mi media vida
 ……………………………………………………

, solamente quiéreme y necesítame,
como tanto te necesito y quiero, yo.

15 de noviembre de 2012

Conversación sobre el amor


+ Estoy harta…
-¿Harta de que?
+ Harta de que miles de preguntas ambulen por mi cabeza y de no tener la certeza de hallar sus respuestas…
- Está bien pregúntame, yo te responderé.
+ ¿Que es el amor?
- Dicen que dos corazones heridos de una misma enfermedad.
+ ¿Y como enfermedad se pueden curar?
- No se con certeza si se pueden curar o no. Supongo que depende de los dos. Lo que si sé, es que estar enamorado, es sentir una perfecta sensación, que muchos llegan a alcanzar, pero que pocos saben valorar. Lo cierto es que no hay remedios, ni curas, ni medicamentos que consigan sanar a lo que algunos llaman sentimientos. Solamente hay actos, palabras, besos y miradas, que consiguen avivar aquella llama, que si no se cuida, siempre se apaga. ¿Pero porque me preguntas todo esto?
+ No sé, solo quería saber…si alguna vez me podría curar de levantarme pensando en tí cada mañana, de soñarte y de contemplarte y nunca cansarme. Porque yo no puedo vivir, sin tenerte aquí. Sin susurrarte, sin besarte, yo…yo... te necesito junto a mí.



Esta vez hice un dialogo, es el segundo, porque simplemente me apeteció espero que os guste y gracias a los que me comentáis y leeis. ;)

9 de noviembre de 2012

El camino de la vida


Aseguran que la vida es un camino que tenemos que recorrer, que si elegimos un camino, los demás caminos son innecesarios. Y lo cierto es que no lo pongo en duda. Solamente afirmo, que siempre habrá un principio y un final; en un libro, en un amanecer, en un amor, en una canción y sobretodo en un corazón. Lo importante no son los logros, ni las metas que hemos conseguido a lo largo de esta vida, si no las veces que nos hemos levantado de las caídas. Levantarnos, ponernos en pie y seguir caminando. Lo realmente importante es cuando nos hemos reído, sin saber porqué, sin tener apenas ningún motivo. Llorar, cuando las lágrimas quemaban y los sollozos se quedaban en la almohada. No dejar de soñar, cuando las desgracias, te atormentaban. Respirar, cuando las palabras, te asfixiaban, porque no las dejabas escapar. Seguir luchando, cuando ya no tenías ni espada. Hasta incluso volar cuando en realidad, te sentías en una jaula encerrada y te habían cortado las alas. No te preocupes por las piedras del camino, ni por los tropiezos, pero tampoco te fíes de ellos. No tengas miedo de mirar atrás, pero no retrocedas jamás. Si te equivocaste rectifica, pero no borres tus confusiones, ni intentes llevar una vida de perfecciones. Porque la perfección, simplemente, no existe. No desees atrasar las agujas del reloj, solamente aliméntate de esos recuerdos, que siempre serán eternos. Si por una casualidad decides pararte a descansar, párate. Pero siempre vuelve a caminar. Nunca ames el principio, ni odies el final. No te pares a pensar y no te preocupes en actuar alguna vez sin más. Solamente date cuenta rápido, de que lo único de lo que te tienes que preocupar en esta vida es de…disfrutar.

31 de octubre de 2012

La batalla más dura

La guerra por fin terminaba, miles de muertes a sus pies, miles de amigos que había dejado atrás,  muertes de mujeres y de niños. Hambre y ganas de morir, sin sufrir. Deseaba abandonar aquellos oscuros lugares, estaba cansado de ver edificios en ruinas o en llamas, harto de que el oxigeno que respiraba estuviese corrompido por el orgullo de unos inconscientes países. Ansiaba con volver a su hogar, ansiaba con ver corretear a los niños por las estrechas calles, deseaba entender que decía la gente, pero después de esos largos y duros años, tenia miedo, miedo a que ella ya no lo amase, miedo a que se hubiese cansado de esperarle o a que lo hubiese olvidado. El pulso le temblaba y se decidió a escribir la ultima carta, fue breve, apenas tardó unos escasos minutos, iba destinada a ella y solamente escribió “La guerra ha terminado, en unos días, estaré en casa junto a tí” dudaba en lo que escribía, puesto que nadie sabe cuando empieza o termina una guerra, dudaba porque tampoco estaba seguro de que ella ansiase su llegada, al fin y al cabo habían pasado tres largos años. Dobló el folio y lo guardó en la carta. Rápidamente recogió las pocas cosas que tenía y las introdujo en su vieja maleta. Fue al apartado de correos y soltó lentamente la carta en el buzón, se le escaparon unas lágrimas, porque pensaba que era la última carta de tantas que había echado durante esos años. Rápido se dirigió a la estación del tren, tenía ganas de huir de aquel horrible lugar, había presenciado tantos horrores y tenido que quitar tantas vidas, que solo buscaba tranquilidad y paz. No era el único que marchaba a casa, miles de soldados volvían también, pero con un semblante aturdido y cansado, pero seguían con un brillo en sus ojos, que aun no se había apagado. Una vez dentro del tren, se sentó, sacó una foto de su bolsillo y sonrió, era ella, tenía ganas de verla, de besarla y de rozarla con sus manos. Todo este tiempo había estado sobreviviendo para volverla a ver, Tras recordar los buenos momentos que había pasado con aquella persona, esos momentos que le habían permitido sobrevivir, miró fijamente la ciudad que dejaba atrás, observaba con la mirada perdida el verde paisaje y el humo que salía del tren. Hasta que finalmente cerró sus ojos y quedo sumido en un profundo sueño.
Se alzó una nueva mañana con su nuevo día. Ella odiaba levantarse pronto, le encantaba dormir junto al calor de su almohada, pero esta vez no, los primeros rayos de luz le habían despertado y había dado un alegre brinco sobre su cama. Sigilosamente se levanta y bostezando se dirige hacia su ventana, la abre con tranquilidad y se estira, volviendo a despertarse en si, desde ahí puede apreciar las preciosas vistas que tiene, millones de chimeneas que se deshacen de su humo y diminutas personas que han decidido madrugar para aprovechar el día. Ella es feliz, su sonrisa la delata, sus ojos están demasiado abiertos para haberse levantado hace unos escasos segundos. Solo ella sabe, la razón de haberse levantado tan temprano, esa razón tiene nombre, anhela tanto volverle a ver, que se viste rápidamente, no se para ni a peinarse su enmarañado pelo, que aun así la permite seguir teniendo encanto, baja las inmensas escaleras hasta que en la ultima, se queda anonadada mirando a esa persona que apenas a cambiado, entonces corre hacia él y ambos se funden en un abrazo, ella riéndose deja escapar un par de lagrimas , mientras que se aproxima a los labios, de esa persona a la que tanto ha esperado. Por primera vez en mucho tiempo, ambos sintieron que la felicidad les inundaba por dentro, el vació se despedía y la soledad les abandonaba. Junto a ella, las noches no fueron solitarias ni frías, consiguió olvidar esos gritos de miles de personas que había traído consigo de la guerra, los veranos pasaron rápidos y los inviernos también, el tiempo se les escapo de las manos, disfrutaron, se amaron como dos locos que se habían vuelto a enamorar por segunda vez y sobre todo se cuidaron.  Finalmente, en realidad él nunca había terminado de luchar, porque la seguía amando, luchaba por su amor y por verla feliz cada día.


 Y es que… No hay batalla más dura que la del amor”

Lo que acabáis de leer es un breve texto escrito por mi claramente, como todos los textos que publico aquí  me habéis animado miles de veces en que escriba historias y me apetecio escribir esto. Queridos mortales, gracias por leerme de verdad. :)

26 de octubre de 2012

Difícil elección…



Tenemos miedo a la muerte. Pero no nos damos cuenta de que morir es algo que tenemos que aceptar. Y que en realidad nos produce mucho más dolor aún, la destrucción. Es ese miedo a que nos rompan por completo, a que nos conviertan en un montón de ruinas. Dejamos de arriesgar, por el miedo a perder más. Nos callamos lo que realmente nos duele, para no llorar por fuera, pero sí por dentro. ¿Pero no te das cuenta? No hay nada peor que tragarte tus palabras, que sonreír cuando solo te apetece dejar de sentir. No dudes las cosas, no te acobardes, no te rindas. Tropiézate, cáete, pero siempre levántate. No lo permitas. No cedas. No te abandones o perderás cobardemente. Créete invencible, créete inmortal.

Ama y le regalarás tu propia autodestrucción, 
a esa persona, sin la que no puedes vivir.

Pero no ames…y ya estarás muerto.

Solamente tú eliges, bueno, a veces no, a veces no hay elección, 
sobretodo, si habla el corazón…

20 de octubre de 2012

En ruinas...


Miraba a su alrededor y solo vislumbraba una multitud de ruinas. Llamas, gritos, muros derrumbándose, todo se desvanecía. Caminaba despacio, sin prisa, no parecía preocuparle el peligro. Se rompía en pedazos, pedazos que ya no la pertenecían. Parecía que no la quedaba nada y que todo lo había perdido. Su interior"Era el mismo infierno" Luchaba contra un caos interno, gélido como el invierno. Llanto, dolor y rabia, conjunto de emociones, cada cual más innecesaria. Espera, decepción y furia, sentimientos que solo la llevaban a la inmensa penuria. Todo en ella estaba en ruinas, hasta la misma Roma la envidiaría. Estaba rota por dentro, hueca y hasta incluso vacía. Y lo peor no era eso, si no que... 
"Ya no sabía ni lo que sentía"

Ella estaba en ruinas como Roma
 y ardía por dentro como Troya. 

 Pero un día todo terminó, llego él y su infierno se acabó.

7 de octubre de 2012

Echar de menos

Cuando comprendes el significado de verdad, de
 “echar de menos a alguien”
es cuando lo vives en tus propias carnes…


Te duele ese momento, en el que las miradas de ambos se cruzan y saben que no se verán en un tiempo. Te duele darte ese último beso que recordarás hasta el próximo encuentro. Te duele soltar su mano y saber que no la podrás agarrar otro poco más. Te duele no poder hablar, porque crees que es mejor callar y no dejar a todas esas palabras escapar. Te duele saber que no tiene sentido decirle “Por favor no te alejes de mí otra vez más” porque no se puede hacer realidad. Tener el corazón en un puño y la respiración a descompás. Perder la noción del tiempo, cuando con él estás. Sentir esa rabia, porque se te escapa una hora tras otra y no poder hacer absolutamente nada, que lo pueda remediar. Pero…porqué no admitir, que lo que realmente más te duele, es no poder recortar la distancia que hay entre los dos y convertirla en milímetros. Entonces es cuando piensas.... Sandra…deja de soñar.

Solamente hablo de.....

                                         Esa  impotencia de querer y no poder.
                      De amar y no poder besar. De desear y no poder abrazar.

Es esa sensación de necesidad y de vacío si tú no estás.
                                                                           
                                              Sandra

26 de septiembre de 2012

¿Sabes qué? Eres una parte de mí


¿Sabes qué? Que yo no te elegí, que te eligió mi corazón. Sí, lo sé, es testarudo y cabezón. Y se desboca cada vez que escucho tu voz. No puedo controlarlo y menos aun tranquilizarlo. Te siento en mis lágrimas, te escucho en mis carcajadas y también te recuerdo cada mañana. Es imposible evitar lo inevitable. Es imposible gritar a los cuatro vientos, que no me importas. Porque eres tan esencial, como soñar las 24 horas del día. ¿Sabes qué? Si no te tengo cerca me falta el aire, me cuesta respirar. ¿Sabes qué? Mis ojos me delatan cada día, una vez más, porque brillan sin cesar. ¿Sabes qué? Que todo esto que estoy escribiendo es verdad. Y me preocupa estar así, por el simple hecho de volver a tropezar. No espero que me levantes, cuando me caiga. He aprendido a levantarme sola. Solo espero, que me ayudes a esquivar esos golpes, que sin duda, la vida nos dará. Aprovechemos  esta oportunidad que el destino tal vez no nos vuelva a regalar.

                                          Y por último.... ¿Sabes qué?


 Solo tú eres el culpable de que mi corazón siga latiendo y de lo que estoy sintiendo.

Por eso créeme cuando te digo que…
                                                                  .....Eres una parte de mí…..

19 de septiembre de 2012

¿Libertad?

He llegado a comprender, que nadie en este mundo es libre, nadie, absolutamente, nadie, lo es. Todos somos esclavos de nuestros sentimientos y pensamientos. También somos esclavos de nuestros silencios y comportamientos. Jamás podremos actuar con libertad, aunque nosotros creamos que sí. Aunque tengamos el mundo en nuestras manos. Aunque no dependamos de nadie. Siempre tendremos esas cadenas que nos aten. Que nos impidan volar del todo. Esas cadenas que pocas veces en la vida se aflojan, solamente, durante unos escasos segundos, para sentir que rozamos la libertad. Pero no te preocupes, no hace falta ser un pájaro, ni tener alas, para poder volar cuando te sientas como en una jaula encerrado y sin libertad.

                     Solo hace vivir con intensidad cada segundo y no perder el tiempo.
                                 Vivir el hoy, como si no fuese a haber un mañana.


Puede que seamos esclavos, sí…
pero yo prefiero ser una esclava,
a ser libre y nunca sentir nada…
Sandra

16 de septiembre de 2012

Se esfumó la indecisión y...


                Mientras que mis sentimientos
                Esperaban inquietos
                Elegí
                No dar mi alma
                A nadie
                Más, porque de esta forma
                Observaba y
                Recogía
                Esperanzas
                De una nueva vida
                Esperando en
                Éste dichoso mundo, entonces 
                La espera terminó y....
Sandra

6 de septiembre de 2012

Tic, tac, las horas pasan y el tiempo se nos va...

Y tú no te das cuenta, pero se nos escapa el verano de las manos....


Se llama tiempo y te recomiendo que no intentes detenerlo y menos aún pararlo. Ver con impotencia pasar las agujas del reloj, no evitará que se paralizen eternamente, te lo aseguro por experiencia. ¿Sabes que? Recuerda tu pasado, vive tu presente y no pienses en el futuro. Solamente preocúpate de reír siempre, de soñar las veinticuatro horas del día, si es necesario, de llorar en hombros que realmente te acojan de verdad, de besar y amar como si fuese la última vez en tu vida. No pierdas el tiempo, no lo malgastes. O te arrepentirás de haberlo derrochado. Porque como bien dicen, “el tiempo es oro”. Jamás cometas el grave error de ser infeliz el resto de tus días, no lo permitas. Huye de esos días tristes, espera tranquilo las tormentas que se ciernen sobre ti, porque finalmente saldrá el sol. No vivas la vida en blanco y negro, ¡vívela en color! No te escondas detrás de una mascara ante los demás y ni te preocupes por el que dirán.

 Preocúpate de una cosa tan fácil como es vivir.
Vive tu vida.
Sandra

29 de agosto de 2012

Perdida en un laberinto sin salida

Todo este tiempo, he dado miles de vueltas sin hallar la salida. Una salida que en realidad no sé si existe. Estoy perdida en este laberinto y se que mis sentimientos me terminarán asfixiando, no se porqué, pero lo presiento. Creo que soy una princesa que solamente busca su cuento. No me importa si tiene un final feliz o no, solo exijo un final, algo que me pueda salvar, porque pasa el tiempo y cada vez me adentro más y más en este laberinto que me mata por dentro. Y lo cierto es que no me duele estar aquí pérdida. Me duele saber que la enfermedad que tengo no se puede curar, porque no existe medicamento. Me duele saber que todo lo que creé en mis sueños tal vez no se haga jamás realidad. Que desaparezca sin más. Ojalá supiese lo que necesito saber para poder actuar con libertad. Adivinar lo que mi cabeza no hace nada más que dudar. Conocer el secreto de aquella mirada de la que huyo, para que no me consiga delatar. No es un capricho, no es orgullo y menos aún terquedad, es algo que simplemente nadie jamás a conseguido controlar. Tengo días en los que soy la persona más feliz del mundo y días en los que me hundo. Por un simple motivo o por un simple comportamiento. Quiero que estos motivos desaparezcan, que me abandonen por completo o que se conviertan en certeza.

Porque yo no puedo aguantar más por dentro, esto que siento.
 Solo pido una señal, una señal, para calmar este tormento, 
que ya no cura ni el tiempo.

                                                                     Sandra

27 de agosto de 2012

Sigue adelante, siempre

Y puede que tu sonrisa muestre la felicidad. Pero en el fondo sabes que eso no es verdad, que no es nada más que una simple mascara que impide a los demás conocer tu realidad. Y sabes que tu voz está harta de no ser escuchada y ansia gritar a los cuatro vientos, lo que en palabras no te atreves a contar. Tu alegría se esfuma por momentos, mientras que tú esperanza por segundos. ¿Como puedes ser tan libre y sentirte como en una jaula encerrada? ¿Como no te decides a relatar a los demás aquello que te atormenta como en estos textos escribes? Cada vez estas más confusa, las personas son las únicas culpables. Te impiden volar y seguir soñando, te cortan tus alas porque ellos nunca tuvieron unas. 


Lo único que sabes es que te alegras de ser tú misma, de no ser lo que otros desean que seas. Ser tú, es lo único que te ha salvado de las caídas y golpes que te ha dado esta vida. Sabes que aquel vacío que tienes por dentro en realidad pesa cada vez más y más. Seguir adelante, seguir, por ese camino, que aún no has elegido, pero por el cual te encantaría caminar toda la vida. Guardar palabras, guardar sentimientos, guardar secretos, te está pasando factura y cada vez te duele mas ese corazón que parece ser de cristal. Esperar y ver impaciente las agujas del reloj pasar, te está llegando a cansar. Olvídate del mundo, de todo lo que te rodea, no esperes algo que puede que quizás no vaya a llegar jamás. 

Camina y no mires atrás y si miras, 
que sea con una sonrisa, pero esta vez, de verdad.

Será un texto triste para algunos, 
esperanzador para otros,
también se que unos pocos identificaréis.
Pero para mí, es una liberación más
 que me ayuda a desahogar esa parte de mí, 
que no se atreve a ser descubierta, por ningún mortal.

                                                          Sandra

21 de agosto de 2012

No esperar nada


El truco está en no esperar nada de nadie. Simplemente para no derrumbarte, cuando lo que anhelabas no se ha cumplido. Es difícil, no hacerse ilusiones, para los que vivimos en las nubes. Bueno no es difícil, es imposible. El problema no es ese, sino cuando tu deseo no se cumple, la decepción te inunda y las ilusiones se rompen. Y duele tanto saber que jamás se cumplirán, saber que en realidad estuviste perdiendo el tiempo. A veces lo correcto es no ilusionarse ni adelantarse a acontecimientos, que puede que jamás ocurran. Es mejor que nos pillen desprevenidos y así llevarnos una grata sorpresa.


 Aunque tampoco está mal que despeguemos los pies de la tierra
 y soñemos durante unos escasos minutos.

Debo comentarios, tened paciencia.
Gracias a los que me comentáis y leéis siempre, de verdad.
A partir de ahora comenzare a publicar más a menudo.
                                                               Sandra

9 de agosto de 2012

Miedo a arriesgar


Todos siempre tenemos ese miedo de dudar en si arriesgar o no, porque no sabemos el resultado, no sabemos si saldremos ganando o si saldremos perdiendo, no sabemos si tras haber arriesgado seremos desdichados o afortunados. No sabemos que destino nos preparan nuestras decisiones. Únicamente tenemos miedo y un montón de dudas que nos asfixian tras el paso de los desesperantes días. Y lo cierto es que nos preocupamos en si abrir esa puerta o en si dejarla cerrada para siempre, nos preguntamos que habrá tras ella, si será la puerta correcta. Muchos deciden arriesgar y hacen lo correcto, porque puede que ganen muchas cosas, aunque pierdan algunas. Pero otros deciden no arriesgar, porque de esta forma no pierden nada, pero tampoco lo ganan.Desgraciadamente me incluyo en ese grupo de los otros, por una sola razón, esa razón, es el miedo a sufrir más, a llevarme otro golpe más, o tropezarme con una piedra más. 

Algo de lo que los mortales 
debemos acostumbrarnos día a día.


En mi mente solo me hago esta pregunta,
que me ahoga por dentro y desespera por fuera....

¿Cuantas serán las puertas que dejaremos sin abrir, 
simplemente por ese miedo a arriesgar?

Tal vez, necesitemos solamente un tiempo para recapacitar en si abrir esa puerta o no.
El problema está cuando ese tiempo se consume y ya no queda nada.

                                                                     Sandra

31 de julio de 2012

No todo es lo que parece


No todas las sonrisas representan la felicidad.
No todas las lágrimas muestran la tristeza.
No todos los amores mueren.
No todas las personas que tienes a tu lado te apoyarán.
No todas las espinas de una rosa te cortarán.
No de todos los errores se aprende.
No todas las oportunidades pasan una sola vez.
No todos los caminos son correctos.
No todos los amores son perfectos.
No todas las piedras de un camino se esquivan.
No todos los libros están escritos.
No todo lo difícil es imposible.
No todos los sueños se cumplen.
No en todas las batallas se gana.
No todos los muros son indestructibles.
No todas las muertes fueron en vano.
No todos los finales fueron felices.
No toda la vida podemos estar lamentándonos de nuestros errores porque....

No todos los días se viven una vez.

En fin….. No todo es lo que parece

                                                                     Sandra

28 de julio de 2012

No estás sola y nunca lo estarás


Muchas veces me invade esa sensación de creer que estoy sola.
 Que estoy sola, en este inmenso mundo. Pensar por cuestión de segundos que no tienes a nadie, nadie con quien desahogarte o compartir secretos. Nadie con quien reír hasta que tengas cosquillas en los pómulos. Es esa sensación de soledad, que todos llegamos a sentir en algunos momentos de nuestras vidas. Pero entonces cuando despierto es cuando me doy cuenta de que no estoy sola, de que no estoy dejada de la mano de dios, de que no soy imprescindible para los demás. Porque  a quienes antes cegada por la confusión no veía a mi alrededor, me han vuelto a levantar de otra caída mas.


Los amigos verdaderos te levantarán,

los falsos solamente te verán caer con las manos cruzadas.


                                                 Sandra

19 de julio de 2012

Mar de dudas


Ahora mismo me encuentro en un inmenso mar de dudas, estoy cansada de evitar ahogarme otra vez más. Son pequeños detalles que me hacen cambiar repentinamente. La duda y la indecisión se han apoderado de mí. No se que pensar con estos malditos sentimientos a flor se piel, porque siento algo extraño en mi interior y sinceramente tengo miedo, sí, tengo miedo a volver a sufrir, porque cuando ya te has ahogado más de una vez, tienes miedo a volver a ahogarte, a volver a tragarte tus palabras, tus sueños y tus deseos…Tienes miedo a volver a hundirte en el fondo y a no poder salir de ahí, tienes miedo a dejar tu ultimo suspiro en un intento de subir a la superficie para poder respirar y no ahogarte. Y entonces es cuando evitas no volver a caer otra vez, evitas el sufrimiento y el calvario que pasaste en el ayer. Pero el problema no es querer evitar lo inevitable, el problema es que mis tobillos ya están mojados, están caminando lentamente por esa arena húmeda y no parecen querer retroceder. Parecen desear sumergirse en el agua otra vez.

Siento que no hay vuelta atrás,
  porque la suerte ya está echada.


                                                 Sandra

12 de julio de 2012

Conversación sobre la muerte


Pasan y pasan los vagones del viejo y sucio tren. Un tren que esta sumido en el olvido. Se oyen las vías, se oyen las paradas, las puertas que se abren y hasta incluso se oyen las voces del ayer.

- ¿Dónde están las gentes con prisas? ¿Dónde están las alocadas parejas que se besaban en las esquinas de la estación? ¿Dónde están las risas de los inocentes niños que iban de las manos de sus madres? ¿Dónde están los que pedían unas pocas monedas para poder sobrevivir?

+ Creo que he hallado una simple respuesta, que responde a todas tus preguntas.

- Entonces…respóndeme…dime….¿Donde están todos?

+ No están, no les busques, porque es imposible que les encuentres. Todos fueron al lugar que tenían que ir, cuando les tocó su hora.

Parecía un tren interminable, parecía que nunca iba a terminar de pasar aquel, perdido y dichoso tren. Pero todo en esta vida se acaba, antes o después se acaba.

Jamas busquéis la inmortalidad, 
buscad y recordad momentos inmortales, 
porque ellos jamas morirán y siempre perdurarán.

                                                 Sandra

6 de julio de 2012

En campos de batalla...


 Muchas de las veces ganamos batallas y otras veces las perdemos. Que diferente es la victoria y la derrota, ambos son grandes polos opuestos al igual que sus reacciones y sus finales. Muchas de las veces no asumimos la derrota. Y creo que ese es uno de los grandes problemas de los mortales. Así que ya que la sinceridad esta impregnada en las letras anteriores, seré sincera. Creo que he perdido una batalla, una batalla, que muchos pierden y que otros mas afortunados ganan. He perdido mucho con esto, pero creo que también he ganado muchas mas cosas. He ganado el convencimiento de saber que lo que existía no llegaba a ningún lugar y que apenas se vislumbraba camino para poder caminar. Y eso duele mas que haber perdido esta batalla. Aún así, creo que me quedan miles de batallas mas por librar, muchas serán derrotas y otras victorias.

En mi opinión...   
       
  …esta vida no esta hecha para ganar siempre,
pero tampoco esta hecha 
para que nos dejemos ser derrotados a la primera.

                                                          Sandra

2 de julio de 2012

Como duele la espera...


Como duele la espera, de alguien que se ha ido y que jamás volverá.
Como duele la espera, de un amor que nos olvidó por completo.
Como duele la espera, de una amistad que se rompió con el tiempo.
Como duele la espera, de nuevos alicientes de vida y de esperanza.
Como duele la espera del que siempre espera y además nunca nada le llega.

 He aprendido que……

Con el tiempo es mejor vivir, sentir y olvidar.
Con el tiempo es mejor no esperar nada de nadie, simplemente para no desilusionarte.
Con el tiempo es mejor no imaginar acontecimientos que puede que jamás sucederán.
Con el tiempo es mejor algunas veces callar, simplemente para no dañar.

Con el tiempo es mejor no soñar demasiado,
porque al final te acabas cayendo y te despiertas en una dura realidad.

Sandra

29 de junio de 2012

Carta, a mi yo del futuro

Mírate, ahora estás llena de preocupaciones, de responsabilidades, de días en los que no tienes tiempo ni para ti. Pero aun así, sigues con esa amplia sonrisa, llena de vida. Tu mirada permanece intacta, con esa llama que parece invencible, esa llama que parece que jamás se apagará.

He visto como te has caído,
pero también como siempre te has levantado.
He visto como te despedías de personas
 con las lagrimas en los ojos y con el puño cerrado.
Descubrí en tu mirada, tu primer amor.
Presencié tus locuras y rebeldías, cada día.
Pero aun así, tu interior sigue siendo el mismo,
luchas por tus sueños,
cuidas a quienes tienen un cachito de tu corazón
y no olvidas a quienes te dañaron.
No das tus pasos en falso, son concisos y seguros,
 a veces retrocedes, pero rectificar es de sabios.
Disfruta del paisaje, disfruta de la vida,
disfruta del aire, del amor y del dolor, disfruta todo cuanto puedas,
porque llegará un momento en el que no sentirás nada,
 en el que terminarás dando en un suspiro, tu último hálito de vida.
Vive el momento siendo tú misma,
No cambies, no aparentes algo que no eres, nunca.

Te escribo porque, he sentido, lo que tú has sentido
 y he vivido, lo que tu has vivido.


Un consejo para el futuro: 


¡Carpe Diem, Sandra, Carpe Diem!
y recuerda…ríe cada instante de tu vida, 
no temas a enamorarte y lucha hasta el final.
 Solo se tú...Simplemente, se tú.


Atentamente desde el pasado: Sandra


Las fotos que pongo en el blog no son mías, 
pero esta foto de esta entrada si, esa soy yo y la del perfil también.
 Leo vuestros comentarios, aunque apenas pueda responderlos, 
os mando miles de gracias desde mi blog queridos mortales.

25 de junio de 2012

Lo hecho esta hecho


Lo hecho esta hecho y no tenemos porqué retroceder las agujas del reloj. Nos caemos, nos arrepentimos y hasta incluso nos culpamos. Pero de los errores se aprende y de las caídas se levanta. ¿Por qué dar marcha atrás? ¿Por qué perder lo ganado? Esperar a lo inesperado, amar al indicado, culpar al culpable y creer a la persona correcta, no siempre ocurre, no todo lo que hacemos es perfecto, ni todo lo que creemos que hacemos mal es imperfecto.

Déjate llevar y olvídate de los demás, del mundo, de todo.
 Solo acuérdate por primera vez de ser 
un poco egoísta y de pensar en ti.

                                                          Sandra

21 de junio de 2012

Soy una mortal más...


Creía que era inmortal...
                           ...pero, me di cuenta, de que en realidad, me guste o no...
                                                                                         ...soy una mortal más.

Una mortal que se cae miles de veces, incluso con la misma piedra, pero que siempre se levanta, soy una mortal más que llora cuando la dañan, que se lamenta cuando se equivoca, soy una mortal más que ama al que no debe amar, que canta y baila para llenarse de vida. Soy una mortal más que recuerda los mejores momentos que han trascurrido por sus ojos, para poder sobrellevar esta vida.....esta vida de mortales.

                                                       Sandra                             

15 de junio de 2012

Como es posible que aún mi mente me castigue



Como es posible, que me hayan quemado las lágrimas que llore por tí.
Como es posible, que no te haya olvidado aún.
Como es posible, que mis ojos estén perdidos buscándote.
Como es posible, que ya no tenga alma, porque tu me la has robado.
Como es posible,que las cicatrices que me dejaste,aún duelan como el primer día.

Solo dime como es posible olvidar y volver a amar,
en tan solo unos pocos días,
porque así me evitaría amarte de por vida.

A veces la última persona en el mundo con la que quieres estar, 
es la única persona sin la que no puedes estar...

(Orgullo y Prejuicio)


                                                  Sandra

8 de junio de 2012

Mordiste la manzana envenenada, como la propia Blancanieves



Confiaste en las personas equivocadas,
 levantaste a las personas menos apropiadas,
 aplaudiste ciegamente a esos verdugos
 que llevarían acabo tu propia muerte, tu propia desgracia.
Inocente como los primeros copos de nieve,
dulce como una joven manzana.
Regalaste sonrisas a los que a tus espaldas te acuchillaban,
defendiste a personas indefendibles,
personas que jamás se jugarían su cuello por tí.
Te gustaría perder esa inocencia que solo te trae nada más que problemas y
quebraderos de cabeza, que te atormentan, que te llevan a ese sueño profundo,
ese sueño del que no te quieres volver a despertar.
Engañada y desilusionada solo buscas envenenar
 con la misma manzana a los que te envenenaron.

Porque esta vez, estás harta, harta de ser la misma tonta
de la que siempre se ríen, de la que siempre se aprovechan.

                                                   Sandra